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Coronavirus: nuestro enfoque sobre el tema

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  • En nuestra opinión, la crisis del coronavirus, que ha estado afectando a los mercados durante unos días, debe entenderse como un "cisne negro" es decir, algo excepcional, sin un precedente directamente comparable.

  • La crisis debe analizarse en base a los datos fiables disponibles, no en especulaciones sobre sus desarrollos futuros, que nadie puede pronosticar hoy con precisión.

  • En estos casos, el daño a los mercados y a la economía tiende a crearse en gran medida no por la causa inicial de la crisis, sino por las reacciones a la misma (ya sean las medidas de contención, interrupciones en las cadenas de suministro o el estrés psicológico).

  • Una propagación viral presenta una característica única, y es que tiende a seguir una trayectoria exponencial, lo que significa que comienza con una aceleración inicial muy fuerte de nuevos casos, que luego se desacelera, se estabiliza, antes de descender y finalmente desaparecer.

  • En este caso, la trayectoria de las nuevas infecciones ya está en su fase descendente dentro de China, pero debido al retraso de la propagación fuera del país, estamos ahora en el comienzo de su fase de aceleración fuera de China.

  • Esto explica por qué los mercados internacionales se tomaron con calma la crisis China, con el apoyo de políticas monetarias aún muy acomodaticias, y por qué ahora la fase de internacionalización de la propagación está enviando oleadas de estrés a los mercados de riesgo globales.

  • Estas ondas durarán hasta que su trayectoria pase a la fase de desaceleración.

  • Económicamente, es probable que el impacto inmediato en la demanda global aumente a medida que el golpe en la confianza del consumidor se amplíe a las economías desarrolladas, y las opiniones públicas requieren que los gobiernos tomen fuertes medidas de contención.

  • Por el contrario, a medida que los empleados de China en el sector manufacturero vuelvan al trabajo progresivamente, como ya lo hacen, el daño a las cadenas de suministro se aliviará.



Como gestores de activos, creemos que Intentar adelantarse a los giros de mercado a corto plazo es, en nuestra opinión, una forma poco fiable de gestionar las carteras en este momento. Nos parece más apropiado centrarnos en dos prioridades:

1) Fortalecimiento en la construcción de nuestras carteras. No evitará totalmente que la volatilidad afecte a los valores liquidativos diarios de los fondos, pero proporcionará un perfil más aceptable para todos los escenarios potenciales, y

2) Asegurarnos que la renta variable que mantenemos en las carteras sean nombres con una convicción a medio/largo plazo muy alta, que estaríamos preparados para aumentar exposición si surgen oportunidades. Dada nuestra opinión de que es poco probable que los responsables políticos, incluso en China, recurran a políticas de reflación masiva este año, estos nombres de alta convicción siguen siendo compañías de crecimiento a nivel global, incluidos los mercados emergentes, con una visibilidad muy fuerte a lo largo de los ciclos económicos.


David Older

Nuestra preferencia estratégica por los títulos de crecimiento no constituye, en modo alguno, un razonamiento manido, vacuo y obvio